¿Qué son?

Suelta De Toros

Las sueltas de toros o encierros se mantienen como costumbre en prácticamente todo el territorio y son habituales en fiestas patronales de la mayoría de regiones. Consiste en que un grupo de personas corra delante de una manada de 6 a 10 toros, vacas, novillos o vaquillas. En principio no está permitido tocar a los animales, que son dirigidos -a veces por un cabestro- a través de las calles del municipio por un recorrido que termina en la plaza de toros. Normalmente el circuito está protegido a ambos lados por un vallado conocido como talanqueras, que evitan que las reses se desvíen.

Existe también la variante de los encierros camperos, cuyo recorrido se da total o parcialmente fuera de la zona urbana y cuentan con la participación de jinetes que persiguen a los toros a caballo por el campo.

Las sueltas de toros también pueden ser individuales con el objetivo de que los participantes puedan recortar y probar cada ejemplar por separado.

Toro a la mar en Dénia

Problema

Aunque la comisión de fiestas es la responsable de garantizar la seguridad, resulta complicado controlar la participación en los encierros, que se celebran en la vía pública durante las fiestas patronales. Cada año, se conocen accidentes provocados por corredores confiados, inexpertos o en estado de embriaguez, y es habitual la participación de menores. Dependiendo de la comunidad autónoma, la edad mínima permitida varía entre los 14 y los 18 años.

Para los toros o vaquillas correr por las calles asfaltadas, rodeados de ruido, música y estímulos ya supone un daño. Por lo general la manada se mantiene unida y trata de hacer el recorrido lo más rápido posible para regresar a los corrales, pero es común ver animales rezagados, desorientados o distraídos con participantes que los burlan e incordian.

En las sueltas individuales, son separados de la manada y se ven obligados a enfrentarse al peligro en solitario, lo cuál les genera todavía más angustia y confusión.

Los encierros suelen celebrarse todos los días durante las fiestas patronales. Estos toros pueden utilizarse en distintos pueblos, sobre todo en localidades pequeñas con poca programación taurina, o pueden ser los mismos 6 que se lidiarán y morirán por la tarde en la plaza.

En ocasiones, el público le lanza objetos contundentes que impactan contra su lomo o cabeza. El objetivo es provocarles para que se muevan y añadir emoción a la actividad.

Razones

Los encierros aparentan ser una de las modalidades más inofensivas para los toros, ya que se perciben como menos violentas con el animal al no haber contacto directo con él. En teoría, no está permitido tocarlo o herirlo. Por muy mansos que sean, hablamos de reses de gran tamaño y fuerza corriendo entre la muchedumbre, que no siempre respeta la distancia con la manada. Son habituales las caídas, contusiones y heridas por cornadas.

El origen de esta modalidad se remonta a épocas en que los pastores transportaban a las reses a pie desde el extrarradio o las ganaderías al centro de la ciudad. Cuando había espectáculo taurino, todo el pueblo se asomaba a las calles para admirar a los ejemplares que serían liados después en el ruedo.

Consecuencias

  • Caídas y lesiones: El pavimento de la ciudad no es lugar para las patas de los toros. Las curvas, cambios de altura y materiales resbaladizos pueden ocasionar caídas y lesiones, que van desde torceduras hasta heridas graves que les pueden provocar la muerte. Como el recientecaso de Ontinyent (Valencia), donde un toro cogió una recta a gran velocidad y se precipitó por un puente. Al caer se rompió las patas y tuvo que ser sacrificado debido a la gravedad de las lesiones.
  • Golpes de calor: Las fiestas patronales de la mayoría de municipios españoles tienen lugar en los meses de verano y las temperaturas suelen ser muy elevadas. A los toros se les fuerza a correr bajo el sol abrasador, fatigándose rápidamente y pudiendo sufrir golpes de calor.
  • Agotamiento: Los bóvidos en general, son animales tranquilos, rumiantes que pasan media vida pastando y la otra descansando. No están preparados para correr largas carreras durante un largo periodo, y menos aún los ejemplares adultos elegidos para este tipo de festejo, mucho más pesados y torpes.
  • Paros cardíacos: El agotamiento, las temperaturas y el enorme estrés causado por el esfuerzo y el acoso del público pueden llevar a los animales a situaciones límites. Cada año se conocen nuevos casos de toros que caen fulminados tras sufrir un infarto.